El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) quiere que el programa Jóvenes Construyendo el Futuro (JCF) tenga más candados para las empresas, con el fin de evitar que se use a los aprendices como mano de obra barata.
La propuesta del CCE a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) es para que en las reglas de operación del programa —pendientes de publicar en el Diario Oficial de la Federación— se establezca que ningún centro de trabajo podrá recibir a un número de aprendices mayor al 50% de su plantilla.
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Actualmente los lineamientos de Jóvenes Construyendo el Futuro permiten que un centro de trabajo reciba hasta 20 aprendices. Esta regla deja la puerta abierta para que una empresa con 10 trabajadores reciba hasta 20 becarios, sólo por poner un ejemplo. Por otra parte, el CCE considera que el límite de 20 aprendices impide que las medianas y grandes empresas oferten más espacios acordes a su capacidad.
“El límite de 20 aprendices por empresas reduciría de manera importante la capacitación que ofrecen las empresas medianas y grandes, que cuentan con un número superior a dicha cantidad y podrían desincentivar la promoción del programa en ese nicho empresarial”, se expone en el documento enviado por el Consejo Coordinador Empresarial, a través de su división de Talento Aplicado, al proyecto de reglas de operación de JCF.
El organismo empresarial pidió además a la Secretaría del Trabajo reforzar los requisitos de los centros de trabajo para ingresar al programa para que las unidades económicas acrediten contar con al menos un año de experiencia en el área en que se brindará el plan de capacitación a los aprendices.
“Este requisito ofrece mayores elementos a la STPS de que el centro de trabajo puede cumplir con el plan de capacitación comprometido”, agrega el Consejo Coordinador Empresarial.
Jóvenes Construyendo el Futuro, el programa insignia de la STPS, vincula a jóvenes de entre 18 y 29 años de edad que no trabajan ni estudian con una empresa participante para recibir capacitación laboral por un año, a cambio el gobierno le asigna una beca mensual de 3,600 pesos. En el 2019 se inscribieron más de 1 millón de becarios y la meta para el 2020 es sumar a medio millón más.
Más oportunidades para los becarios
Para evitar que los jóvenes pierdan la oportunidad de vincularse con una empresa, el organismo propone que el plan de capacitación pueda ser declinado por el becario antes de iniciar su entrenamiento sin que la persona pierda la posibilidad de buscar otro centro de trabajo. Ya que actualmente el aprendiz puede cambiar sólo una vez de centro de trabajo.
“Es necesario que se aclare que también el joven puede declinar después de la entrevista su ingreso al centro de trabajo y buscar otra opción, con base en la información que recibirá del representante del centro de trabajo. Por ello, es importante que desde este apartado el joven cuente con la mayor información posible de qué condiciones debe aceptar antes de ingresar al centro de trabajo”, destaca el Consejo.
En ese sentido, los empresarios quieren que los lineamientos comprometan a los centros de trabajo a dar a conocer al joven desde el primer encuentro las obligaciones que deberá cumplir durante su estancia, como reglamento interior o confidencialidad de la información que utilice o produzca durante su capacitación.
Entre otros cambios, el CCE propone que la cobertura médica se extienda a un seguro de vida y e incapacidad por accidentes para los becarios durante la capacitación, en este punto insiste en al menos tres ocasiones durante la presentación de las propuestas. “Si bien los becarios no deben participar en actividades de riesgo, no están exentos de algún accidente grave”, argumenta el organismo.
Además, el Consejo considera necesario establecer que la beca y el seguro médico estén condicionados a la asistencia a las capacitaciones.